La película comienza en un seminario cristiano en donde, Sam Fernández, un buen hombre devoto conoce a Bergman, que está más interesado en pasarla bien. Tras concluir el seminario, Sam toma la vía que conduce a Dios, mientras Bergman se sumerge en el contrabando y otras actividades nefastas. Sam viaja a un pequeño pueblo costero donde se vuelve sacerdote y se hace muy cercano a un joven llamado Tomas, quien está enamorado de Beatrice. Sin embargo, Bergman, también toma a Tomas bajo su tutelaje y tras un sucio juego hace que Sam termine en la prisión.